Producto añadido al carrito
Inicia sesión para finalizar tus compras con mayor rapidez.
El pendiente Inverness de Prim es un procedimiento fácil y seguro para una perforación indolora del lóbulo de la oreja. Viene en un estuche esterilizado y está completamente sellado individualmente para prevenir la contaminación antes de la colocación. Tiene forma de corazón.
Este pendiente Inverness de Prim se utiliza para la perforación del lóbulo de la oreja. Tiene forma de corazón, revestido de oro 24 K sobre una base de acero inoxidable grado médico, que no irrita la piel. No contiene níquel y dispone de un cierre de seguridad para prevenir daños.
Se presentan en cápsulas individuales herméticamente selladas y esterilizadas que permiten que la punción del lóbulo de la oreja sea totalmente segura. Los pendientes Inverness en ningún momento están en contacto con la piel hasta que se introducen en el lóbulo de la oreja, para impedir posibles contaminaciones antes de la perforación.
Sus varillas de perforación con extremos ultrafinos permiten un deslizamiento suave a través del lóbulo de la oreja para una positiva experiencia.
Los cierres de protección patentados de Inverness previenen que la punta de los pendientes cause lesiones al usuario. Además, permiten evitar la presión de las tuercas convencionales y favorecen un flujo de aire adecuado para facilitar el proceso de cicatrización.
El pendiente Inverness está indicado para la primera apertura segura de los orificios del lóbulo de la oreja. Son adecuados para niños, adolescentes y adultos.
Limpiar el lóbulo con una gasa con antiséptico, marcar con un rotulador y perforar con el sistema patentado Inverness sin contacto.
El proceso de cicatrización en el lóbulo de la oreja generalmente tarda entre 4 y 6 semanas. No retirar ni cambiar el pendiente hasta que se haya completado el proceso de cicatrización. Mantener la zona perforada limpia y ventilada, revisarla un máximo de 3 veces al día. Lavar las manos antes de tocar el pendiente para evitar contaminar la zona perforada. No utilizar agua oxigenada ni alcohol. Limpiar con jabón neutro, en lo posible con un agente germicida y enjuagar con agua tibia. En cada limpieza, rotar el pendiente para favorecer la correcta abertura del canal y evitar que se formen adherencias. Mantener la superficie perforada, seca y limpia, después de nadar o hacer ejercicio físico. Procure que el pelo o la ropa no tiren del pendiente y provoquen desgarros. Retira con una gasa humedecida en suero fisiológico cualquier resto de fluido de la herida. Aflojar los pendientes si están demasiado apretados. Se aconseja no quitar el pendiente por más de 24 horas durante los primeros 6 meses.
Titanio, acero quirúrgico, láminas de oro 24 K, cristales, circonitas.
