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Este tratamiento de cola de caballo es elaborado por los laboratorios El Naturalista. Tiene propiedades diuréticas debido a su contenido de sales minerales y flavonoides. También favorece la remineralización. Se recomienda administrar el tratamiento de cola de caballo solo en personas adultas.
Cola de caballo de El Naturalista es un producto sanitario que contiene equiseto o cola de caballo, una planta que colabora con la reducción de los líquidos en el cuerpo.
La cola de caballo es rica en sales minerales como el potasio, el calcio, fósforo, magnesio y silicio. La combinación de estos elementos proporciona un efecto diurético sobre el aparto urinario.
También contiene flavonoides, que destacan por sus propiedades antioxidantes. Ayudan a proteger las células del daño oxidativo producido por los radicales libres.
Está formulado para ayudar a remineralizar y recalcificar. Por tanto, sirve para aumentar la fortaleza del tejido conjuntivo. Otros de sus beneficios son su efecto antiinflamatorio y su contribución para el mantenimiento del colágeno.
Gracias a su contenido de ácido silícico, ayuda en el cuidado de la piel brindando elasticidad y suavidad. Puede ser considerado un astringente natural. Por eso, se utiliza para favorecer la cicatrización de heridas y curar las ulceraciones dérmicas.
Este producto previene las infecciones genitourinarias, ya que colabora con la excreción de la orina y la expulsión de microrganismos patógenos. También es útil para la prevención de los cálculos porque, a través de la micción, se eliminan microcristales y arenillas de oxalato cálcico.
La cola de caballo de El Naturalista está recomendada para personas adultas que tienen retención de líquidos. Además, se indica para fortalecer los huesos fracturados y para la remineralización ósea.
Se usa de manera tópica sobre heridas y úlceras en la piel.
La dosis recomendada depende del uso que se dé al producto. Para un tratamiento oral, se deben hervir 6 g en una taza de agua durante dos minutos. En este caso, la posología indicada es dos o tres tazas al día.
Para el uso externo, el procedimiento consiste en hervir 50 g en un litro de agua. Una vez hervida, la cola de caballo se aplica mediante lavados o compresas.
Se aconseja ingerir al menos dos litros de agua durante el tratamiento oral. De esta manera, se alcanza el efecto diurético y, al mismo tiempo, se previene la deshidratación.
No es apto para niños, mujeres embarazadas o que estén lactando. No administrar en personas con gastritis o úlcera gastroduodenal.
Si se toma otro tratamiento o se tiene alguna patología, se deberá consultar al médico tratante antes de emplear este producto.
La cola de caballo puede generar un desequilibrio hidroelectrolítico que agrava las insuficiencias cardiacas o renales.
Sales minerales (silícicas, potásicas y magnésicas), saponósidos, flavonoides (isoquercitrina y equisetrina) y trazas de alcaloides.
